sábado, 27 de septiembre de 2008

Sueños

Hace días que no actualizaba. Creo, que a estas alturas del año, acercándose ya octubre, es propicio hacer un balance parcial de lo que ha sido mi vida en los últimos meses.

Partiré, primero con lo más importante que me ha tocado vivir hasta ahora, esto es, Paula. Siempre pienso, que aunque externamente aparentaba estar bien (y conforme), jamás logré arrancar de mi, aquellos sentimientos que siento por esa linda persona. Esto, explicaría en gran parte el que hoy esté más seguro que nunca, que no la quiero dejar ir una vez más.

He tomado excelentes, buenas, malas y pésimas decisiones. Dentro de estas últimas, está el haber renunciado (por aquel entonces) a la oportunidad de seguir juntos. No supe leer tan bien las señales que auguraban un futuro portentoso, sino que muy por el contrario, estimé todo imposible, irreal. Luego, después de algun tiempo, no pude seguir negando ; aún le amaba y algo tenía que hacer por estar con ella.

Yo no sé, realmente, si lo he hecho todo, pero si puedo afirmar con certeza que al menos lo he intentado. Ella es una persona que realmente vale la pena, quiero decir, como ella hay pocas. Es bella, femenina, delicada, alegre, valiente, decidida, risueña, simpática, independiente, soñadora y así, no terminaría jamás de enumerar sus muchas cualidades.

Jamás entenderé que pasó por mi mente por aquel entonces. Hoy, haciendo uso de mi coraje, razón y locura peleó por recuperar, su corazón. Alguno de estos días de misión han sido amargos y hasta tristes. Es un sentir extraño, cada vez que las esperanzas de victoria son menos. Luego, recuerdo siempre nuestros días de felicidad y promesa, y casi alentándome en base a ellos, más el apoyo incondicional de Mariela y Constanza, es que me digo a mi mismo que no puedo renunciar. Al final estoy casi convencido, que la verdad y el amor sincero prevalecerán. Te amo Pau.

El segundo punto, es Universidad y familia. Con respecto al primero, ha sido una año espectacular. Me he adaptado a la nueva vida, me ha ido bien (exceptuando algunas caídas); pero en términos generales algo que cumple totalmente mis espectativas. Ya casi acabando el año, restan algunas pruebas finales para llegar a los siempre decisorios exámenes.

A mi familia, logré verle después de tanto en mi tierra natal. Fueron días de absoluto relajo y descanso, motivo todo por cierto de fiestas patrias. Reconozco esto, como un influjo anímico-emocional importante.

Yo me siento bien, aunque a veces cansado, bien. El pequeño vacío que tiene mi corazón está ya expuesto, sin embargo, con sus resplandores de esperanza, logra que encienda en mi aquella llamita de no desistir jamás.

Finalizando este 2008, espero estar celebrando un paso a segundo año y el tener su suave mano junto a la mía nuevamente.

No hay comentarios: